PROYECTO DE RECUPERACIÓN
Conservación y Restauración
Valorar el estado de conservación antes de intervenir
El trabajo de conservación/restauración en esta primera fase del Proyecto de Recuperación Cueva de Villaverde ha consistido en la valoración del estado actual del yacimiento y las medidas que serían necesarias tomar para permitir su conservación y evitar su deterioro y pérdida.
Así, el objetivo es proponer, en orden de prioridad, una serie de intervenciones de conservación y restauración a llevar a cabo en las sucesivas campañas de estudio arqueológico del yacimiento.
La mayoría de las actuaciones que se proponen son principalmente de conservación, puesto que según los criterios actuales de conservación y restauración arqueológica, definidos por la Carta Internacional para la Gestión del Patrimonio Arqueológico de Lausana (1990), las intervenciones en los yacimientos arqueológicos tienen que ir encaminadas a asegurar su conservación para el estudio, minimizando las intervenciones de restauración para evitar distorsionar la lectura e investigación científica de los restos.
Actuaciones de conservación necesarias
Tras el estudio del estado del yacimiento en el exterior podemos definir que las actuaciones prioritarias son las siguientes:
Zona exterior


Estructuras del exterior del yacimiento y puerta de acceso
- Proteger el yacimiento de las aguas pluviales que rodean el perímetro de la zona arqueológica bajo el toldo, es una intervención urgente y primordial para asegurar la conservación de todo el conjunto. Ésta se realizaría desviando las aguas y colocando una nueva puerta que cierre correctamente la entrada de la cueva
- Para intentar minimizar el deslizamiento de las tierras del corte sobre el muro aborigen conservado en el perfil sureste se propone una contención mecánica, ya que ningún producto podría evitar su derrumbe sin cubrirlas e impedir su estudio. A través de un sistema un tanto complejo se podría estabilizar la estructura evitando su derrumbe durante los trabajos de excavación y nos permitiría continuar trabajando sobre esta zona conservando el yacimiento.
Zona interior
- La intervención más urgente a llevar a cabo es la eliminación de la filtración de aguas negras en el interior del tubo volcánico. Esta actuación además de devolver la salubridad al espacio, reduciría la humedad relativa interior y por lo tanto actuaria en pro de la conservación de los restos más frágiles y friables (pequeños restos óseos y cortes estratigráficos).
- Posteriormente, tendría que buscarse el origen de las filtraciones con concreciones calcáreas de los laterales del tubo. Una vez individualizado se tendrán que tomar las medidas necesarias para desviar la aportación de agua hacia el interior, y de este modo colaborar también al descenso de la humedad relativa.
- Se recomienda realizar un seguimiento de las fisuras que recorren todo el tubo, por parte de un geólogo. Además de la colocación de más testigos de yeso en otras grietas que puedan sugerir posibles desprendimientos en un futuro.
- Se considera imprescindible llevar a cabo un seguimiento microclimático del interior de la zona arqueológica, siempre en relación con las condiciones climáticas exteriores.
- Los muros que conforman la zona de asientos conservada junto a la entrada del tubo volcánico se han desprendido debido al deslizamiento de tierras bajo las mismas. Esto ha provocado el derrumbe de algunas piedras de la estructura. Así es prioritaria la contención de las tierras y piedras de esta zona para evitar que continúe desprendiéndose y acabe por desaparecer.
- Se propone realizar el diseño e instalación de una nueva iluminación en todo el yacimiento que permita una visualización correcta del espacio para su estudio. Esta iluminación tendría que realizarse con luces frías de bajo consumo, para no inferir negativamente en las condiciones microclimáticas del espacio, por ejemplo aumentando la temperatura. Además se tendría que estudiar un sistema de fijación de la misma, que no dañase los restos.
- Para las futuras campañas de excavación arqueológica del yacimiento, se recomienda el seguimiento de las mismas por parte de un conservador-restaurador de material arqueológico. Esto permite la actuación rápida y coordinada ante cualquier nuevo hallazgo y asegurar así su buena conservación. Además de que se pueden llevar a cabo trabajos de contención durante las distintas fases de excavación, ayudando a mantener la forma de las estructuras durante los trabajos arqueológicos.




Estructuras del interior de la Cueva con distintos grados de conservación en los que habrá que intervenir. Filtraciones de aguas residuales que obligan a una intervención de urgencia para proteger el yacimiento.
restauración
Entrevista | Sonia Argano
La restauración y conservación de las estructuras de piedra presentes en el yacimiento es uno de los objetivos fundamentales de este proyecto. La restauradora Sonia Argano nos habla de cómo se lleva a cabo este procedimiento en la Cueva de Villaverde
